Perteneciente a la familia de los primates homínidos, el chimpancé común, también conocido científicamente como Pan troglodytes, es un animal originario de las zonas tropicales de África. La importancia de este animal, es que es el pariente más cercano al humano. Hace uno 6 millones de años las ramas evolutivas de uno y otro se separaron, pero chimpancé y humano comparte el 95% de su código genético. Estos animales están dotados de una inteligencia avanzada, comparados contras especies animales y esto los acerca aún más al género humano.
Descripción del chimpancé: Las características
Si bien el chimpancé se desplaza apoyado en sus 4 aptas, puede hacerlo perfectamente erguido, en esa posición, los adultos miden entre 1 y 1,7 metros. El peso de estos animales varía entre los 50 y 70 kg, en el caso de los machos y entre 25 y 50 kg en las hembras. En cautiverio se han registrado casos de chimpancés que llegaron a pesar 80 kg. Los largos brazos del chimpancé les permite balancearse de rama en rama de los árboles. La envergadura de los brazos extendidos puede llegar a ser una vez y media la altura del animal. Sus manos son largas, al igual que sus dedos, siendo su pulgar más corto y separado del resto, lo que les brinda la habilidad moverlos con independencia del movimiento del pulgar. En el caso de los pulgares, al igual que el dedo grande del pie son oponibles, permitiendo un agarre preciso.
El cuerpo del chimpancé está cubierto por un pelaje denso y grueso en todo su cuerpo, es de color marrón, casi negro y su rostro, palmas y plantas de los pies no presentan pilosidades.
La reproducción del chimpancé
Es importante aclarar que el chimpancé es uno de los pocos animales que se aparea no sólo para la reproducción, sino que lo hace como actividad social, para relacionarse para solucionar situaciones conflictivas, para demostrar su afecto. Al igual que los humanos, estos animales pueden aparearse con ejemplares de su mismo sexo.
Los chimpancés llegan a su madurez sexual a los 13 años de edad, en el caso de los machos. Las hembras, por su parte, comienzan su actividad sexual a los 11 años y al poco tiempo ya suelen tener su primera cría. Las hembras de esta especie tienen un promedio de una cría cada 5 años y su ciclo menstrual es de 36 días.
Cuando la hembra entra en celos, la región ano-genital de éstas se hincha y adquiere una tonalidad rojiza, que le indica a los machos que están en período de recibirlos, es allí cuando comienza el cortejo, en el cual os machos exhiben a la hembra sus órganos genitales, como forma de atracción. En el caso que la hembra acepte el cortejo de un macho, se acerca a éste y se produce la cópula, que, como particularidad, se produce de frente. Durante el celo, la hembra puede aceptar ser copulada por varios machos.
El período de gestación, en el chimpancé, dura unos 8 meses y la hembra puede concebir y parir en cualquier época del año. El cuidado de las crías es una actividad exclusiva de las hembras, que se desarrolla sin ningún tipo de intervención del macho. El destete de los ejemplares jóvenes se produce recién entre los 4 y 6 años de edad, hasta ese momento son completamente vulnerables sin la asistencia de la madre. Inclusive, en caso de muerte de la madre, es muy difícil que sus crías sobrevivan.
Alimentación
Aunque por su dieta básica, se podría considerar al chimpancé como un herbívoro, ya que principalmente se alimenta frutas, plantas, tubérculos, pero en realidad son omnívoros ya que complementan su dieta con insectos, huevos y pequeños animales muertos. Se ha logrado documentar actividades de cacería, por parte de grupos de estos animales, sus presas suelen ser cachorros de leopardos y otros depredadores, aunque se cree que esto constituye más un acto de defensa que un hábito alimentario.
El comportamiento del chimpancé
Uno de los elementos que hace concluir que los chimpancés están dotados de una inteligencia avanzada, es el hecho que han logrado utilizar herramientas para sus actividades. Utilizan piedras para romper frutos de cáscaras duras. También se ha podido observar que, con la ayuda de palos, obligan a los insectos a salir de los árboles. Una actividad muy llamativa es ver como utilizan sus manos para beber de los arroyos.
Debido a su pelaje, los chimpancés son proclives a alojar muchos insectos entre sus pelos, por ello es común ver que dediquen parte del día acicalarse. Esta es una labor que desarrollan de manera social, ya que lo hacen unos con otros.
En cautiverio, se ha logrado que los chimpancés aprendan el lenguaje de señas y logran comunicarse a partir de éste. Son animales que pueden demostrar perfectamente sus estados de ánimo y emociones, para ellos utilizan abrazos, besos, palmadas en la espalda y caricias.
El chimpancé, profundamente emparentado con los seres humanos, hoy se encuentra en peligro de extinción debido a la tala indiscriminada en su hábitat natural y por la cacería que se desata sobre ellos para el consumo de su carne.
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