Uno de los más encumbrados habitantes de la sabana africana, es el guepardo, también conocido como chita, es el animal más veloz del mundo. Esbelto, de bello pelaje, de movimientos ágiles y agradables, este felino es un verdadero seductor del reino animal.
El nombre científico de estos animales es Acinonyx jubatus y es la única especie viva de su género, el resto se encuentra extinta, de igual manera, los guepardos se encuentran en peligro de extinción.
Características de los guepardos
Toda la anatomía de este animal, es la de un verdadero corredor. Es un felino de gran tamaño que llega a medir entre 110 y 150 cm, a lo que hay que sumar su cola de unos 80 cm aproximadamente. Su altura alcanza los 90 cm y puede llegar a pesar unos 60 kg. los machos son apenas un poco más grandes que las hembras.
El pelaje que cubre su cuerpo es corto y ligeramente amarillo con pequeñas pintas negras. La piel del guepardo fue, durante muchos años, muy apreciada, otorgaba distinción a quienes la usaban. Esto puso a la especie al borde de la extinción y hoy, en numerosos países se encuentra protegida. Una de las características distintivas es la raya negra, que el guepardo exhibe, desde el ojo hasta la boca.
A diferencia de otros felinos, el guepardo carece de uñas retráctiles, por el contrario, son uñas largas y levemente curvas. Esta característica es vital en la velocidad que han logrado desarrollar, ya que la disposición y forma de las uñas actúan como elemento de tracción, logrando que el animal cobre mayor impulso en su carrera.
Su cabeza es pequeña y redonda y junto a sus patas largas y delgadas, le otorgan una capacidad aerodinámica que contribuye a que el guepardo sea el animal terrestre más veloz.
La reproducción del guepardo
La reproducción de este felino concita la atención de los especialistas y las autoridades, debido al gran riesgo de extinción en que se encuentra la especie. Los guepardos son polígamos, la hembra se servirá de uno o más machos para procrear y una vez finalizada la cría de su última camada, buscará otros machos para que la fecunden.
El período de gestación se extiendo por, aproximadamente, tres meses – puede llegar a durar 95 días – luego del cual, la hembra da a luz una camada de 3 cachorros. La noche posterior al nacimiento, la hembra trasladará a los cachorros a un lugar seguro, donde no puedan ser alcanzados por otros depredadores como leones o hienas, en los momentos que la madre esté cazando. Los cachorros de guepardo no serán capaces de seguir a su madre, hasta pasadas las 4 semanas.
El padre no participa en la alimentación, cuidado y seguridad de los cachorros, que dependerán exclusivamente de su madre. Recién a los 10 meses de edad, los pequeños guepardos estarán en condiciones de cazar animales y pequeños y a los 18 meses ya perderán todo contacto con la madre.
Por la acción de otros depredadores y frío y la falta de alimento, sólo el 30% de los cachorros logra llegar a edad adulta. Este porcentaje es el que tiene en riesgo la supervivencia de la especie, por otro lado, es importante señalar que el guepardo no se reproduce en cautiverio. Por ello la importancia que han adquirido, a nivel mundial, las reservas y parques nacionales ubicados en países como Namibia, Botsuana, Tanzania, etc.
El guepardo en acción
Este felino es uno de los depredadores más astutos. El guepardo debe agudizar su instinto ya que uno de los mayores obstáculos que encuentra para su alimentación es la acción de animales carroñeros grandes como la hiena, que suelen arrebatarle las presas capturadas. Es por eso que el guepardo, a diferencia de la mayoría de los predadores y carroñeros, es de hábitos diurnos, que es cuando el resto de los depredadores duerme. El guepardo no es un animal feroz y evita por todos los medios enfrentarse al resto de los depredadores.
El guepardo posee una vista excepcional. Con ella detecta y observa pacientemente a su presa. A pesar de su velocidad y gran sprint, este cazador no se abalanza sobre su presa, en una carrera alocada. Sólo atacará cuando esté seguro que va a lograr su objetivo. Este es uno de los predadores que posee el índice más alto de éxito en sus ataques.
Sus presas favoritas son gacelas, impalas, ñus y cebras. Cuando estas aparecen en manadas, el guepardo observa a aquellos animales más atrasados del grupo, de donde seleccionará a quien se convertirá en el almuerzo de su familia. A diferencia de los leones, los guepardos son animales de hábitos solitarios, no se mueven ni cazan en manadas o grupos.
Se calcula que, en el mundo, quedan uno 10 a 12 mil ejemplares en libertad de estos animales, la mayor parte de ellos en el este y en el sudeste de África, donde se desarrollan diferentes programas para su preservación.
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