Hay una especie de gusano, oriunda del continente asiático, que se ha hecho famosa por su capacidad para producir una seda que destina a la construcción de su crisálida. Su familia es la Bombycidae, y responde al nombre científico de Bombyx mori. El gusano de seda, como se le conoce popularmente, es un lepidóptero que suele criarse en muchos lugares para el aprovechamiento de la seda que fabrica. Su fase de crecimiento consta de cuatro etapas: huevo, larva, crisálida y adulto. A los 24 días alcanza la total madurez.
El huevo del gusano de seda
Alcanza como máximo 1,5 mm de longitud. Su cascarón consta de una película dura que va del amarillo tenue al gris, para luego tornarse violeta o verde. Aquellos huevos que no se fertilizan son distintivos porque conservan el matiz amarillento original, el gris oscuro es habitual y cuando se tornan esmeralda es indicio de que están por abrirse.
Larva
Se retiran los cartones donde se refrigeraron los huevos para que se aclimaten. La incubación tiene una duración de 15 días. Sin embargo, en temperaturas bajas los huevos no eclosionan. En tales casos, suelen abrirse a mitad de febrero.Tal método permite que nazcan las larvas cuando su alimento –las hojas de la morera- están en pleno auge. Usualmente, los huevos se rompen a más tardar al mediodía.
Es posible preservar las hojas en bolsas herméticas dentro del congelador. Estarán en perfecto estado por siete días. Se aconseja tener como máximo una veintena de ejemplares en una caja regular de calzado.
¿Cómo se forma el cuerpo del Gusano de seda?
La cabeza del gusano de seda cuenta con seis fragmentos e igual cantidad de ojos. También posee dos antenas que le ayudan a orientarse, fuertes mandíbulas para masticar, así como un aparato para hilar la seda. Su tórax lo forman otros tres fragmentos.
Por otro lado, el abdomen es la parte más alargada y consta de 11 segmentos. Los últimos tres están fundidos, por lo que se complica distinguirlos.
Las mudas del gusano de seda
Cuando deja de ingerir alimento y se mantiene quieto es posible que el gusano de seda esté por mudar. Entonces, hará una diminuta base con seda, levantará la testa y se apoyará únicamente con sus patas posteriores. En ese instante, es imperante no interrumpirlos porque se rompería su inmovilización y le sería imposible deshacerse de su piel. Después de la muda, parecerá que se ha ensuciado, su cuerpo lucirá estriado y húmedo. En cuestión de horas, volverá a estar liso.
Cuatro veces sufrirá estos cambios hasta medir ocho centímetros de largo y contar con doce fragmentos. Tendrá una coloración blanca o amarilla con franjas negras que denotan cada fragmento.
Crisálida
Transcurridos 30 días el gusano de seda buscará sitios secos y apartados para construir su capullo y convertirse en ninfa. Los capullos pueden ser naranjas, níveos o amarillos.
Antes de hacerse crisálida, la larva del gusano de seda va adquiriendo un tono amarillo que cubrirá todo su cuerpo. El animal se empequeñece y las regiones amarillas se vuelven flácidas.
Sus excrementos se tornan verdosos y pierden consistencia. La larva será torpe y sus patas no podrán sostenerse como antes. El gusano de seda se vale del almidón de su comida para crear el hilo. Dentro del tracto digestivo el almidón es líquido, pero se hace sólido gracias al aire. Gira sobre sí para envolverse en un hilo de 1500 metros de longitud. Esto dura hasta 72 horas.
La adultez
El gusano de seda fisura su capullo segregando ácido que dividirá el hilo de seda para poder salir. Por las próximas 2 semanas que vivirá, no comerá nada, se concentrará en encontrar pareja para aparearse. Nace usualmente en las horas nocturnas.
Los machos son más grandes que las hembras, poseen un abdomen esbelto y alas de mayor tamaño. Las hembras segregan líquidos marrones o naranja. Copulan por horas, luego los machos irán por nuevas parejas y las hembras se concentrarán en la puesta. Después de esto, la hembra muere.
En casa
Al gusano de seda se le cría como mascota o para que los niños vean de cerca cada etapa de su vida, debido a que es totalmente inofensivo y sencillo de cuidar. Los colores del capullo variarán conforme a los tonos que tengan en sus patas.
Ensucia escasamente, se le puede poner en cajas de calzado y no exige demasiadas atenciones. Se recomienda que los criadores del gusano de seda cuenten con árboles de morera en casa para garantizarles el alimento.
También hay que mantenerlos en ambientes frescos, porque pueden morir por calor excesivo. El gusano de seda (pasando cada etapa de su ciclo) vive máximo 60 días.
Alimentación del Gusano de seda
Las hojas de morera se recogen desde el tallo. Deben estar frescas, y si se almacenan en la nevera, debe retirarse el exceso de frío. Puede hacerse calentándose con las manos. Además, deben estar suaves y troceadas en julianas. En su segunda fase de crecimiento, los gusanos de seda pueden comer hojas completas, y en la tercera necesitarán diminutas ramas.
Las mariposas del gusano de seda no pueden volar y solo sobreviven en cautividad. Sin embargo, para tocar a los gusanos hay que esperar a que tengan 5 cm y tratarlos con sumo cuidado. Al tocarlos se comprueba que son fríos, suaves y blandos.
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