Desde hace 500 millones de años, se conoce de la existencia de una especie que aparentemente no logró evolucionar. Se trata de un animal prehistórico llamado lamprea, que guarda cierto parecido con la anguila, sin llegar a ser parientes. Científicamente recibe el nombre de Hyperoartia, y pertenece a la clase agnatos, que agrupa a los peces sin mandíbulas.
Es paradójico porque taxonómicamente no está identificado como un pez, pero sí comparte algunas características con ellos. Se sabe que pasa una parte de su vida en agua dulce y la otra en aguas marinas. Por ello se le considera una variedad anádroma, como el salmón.
ESTADOS de la lamprea
La lamprea presenta dos estados completamente diferentes: larvario y adultez. En su forma larvaria mide de 10 a 20 cm, no posee ojos, ni dientes, y cuenta con un aparato digestivo diferente. Alrededor de su boca tiene un borde de pequeños pelos llamados bárbulas. Estos los utiliza para filtrar las pequeñas criaturas de las que se nutre. Tiene siete pares de huecos branquiales por los que respira, además de aletas dorsales.
Las lampreas larvas son tan distintas de las lampreas adultas que, anteriormente, los investigadores opinaban que se trataba de géneros independientes. Aún hoy en día se les nombra como ammocetes (larvas jóvenes).
Las larvas permanecen o hacen vida en el lodo o en los ríos, por unos 4 o 5 años, aproximadamente. Luego de eso se transforman, pasan a su forma adulta y se mudan a un ambiente marino. Allí vive unos tres años y su instinto reproductivo la hace regresar al río, donde puede ser capturada o muere de forma natural. Por lo general fallece al poco tiempo de la reproducción.
LAMPREA ADULTA
De adulta la lamprea presenta un cuerpo largo, delgado y cilíndrico. Su piel es como una gelatina, resbaladiza. No posee escamas ni mandíbulas. Su cabeza y sus ojos son de reducido tamaño. Mantiene las siete rendijas branquiales. Su boca, aunque circular, tiene figura de ventosa. Muestra dientes chicos y duros como la lengua. Por otro lado, presenta una unión de sus 2 aletas y una cola terminada en punta.
CARACTERÍSTICAS de la Lamprea
La lamprea en general es de color pardo amarillo o verde azulado, de máculas ambarinas, y vientre claro. Como se dijo, el cuerpo es de contextura gelatinosa, con forma cilíndrica. Casi alcanza el metro de longitud. No cuenta con un esqueleto óseo, pero sí con un notocordio cartilaginoso que cumple la función de sostén principal.
Tiene una particularidad que podría definirla como un animal refinado. Y es que prefiere las aguas limpias y evade los ríos sucios o infectados.
REPRODUCCIÓN
La lamprea utiliza los cauces de agua dulce para reproducirse. En general elige ríos de mucho volumen, de aguas relativamente tranquilas. Es ovípara. Llega a colocar un promedio de 60.000 huevos, de los cuales muy pocos (quizás un uno por ciento), se convierte en un nuevo ser.
Su conducta reproductiva es bastante curiosa. Busca las corrientes de agua dulce para desovar. El macho con ayuda de la hembra, edifica una morada de pedruscos. Durante el desove el macho se adhiere a la hembra con su boca y perdura enrollado a ella.
Igualmente, la lamprea se afirma a un peñasco del fondo. Depone los huevos, que fertilizará inmediatamente el macho, y el torrente del río los llevará hasta el nido de piedras. La larva después de salir del cascarón ( a las 2 o 3 semanas), permanecerá enterrada en la arenilla pocos días.
Es al alcanzar el ½ cm de largo, cuando emerge y se deja transportar por el río, hasta aguas más serenas. Aquí cavará un refugio propio donde perdurará aproximadamente unos 5 años, llegando a medir unos 20 cm. Luego marchará al mar siendo toda una adulta.
ALIMENTACIÓN de la Lamprea
Una vez que la lamprea llega al mar, vive en ese ambiente entre dos y cinco años, durante los cuales hace vida de parásito en otros peces. Como una especie de vampiro acuático, les sorbe su sangre para sustentarse. Para que esta no se espese, la lamprea genera un líquido anticoagulante.
En su etapa larvaria la lamprea no posee dientes y se abastece chupando cuerpos microscópicos. Pero al pasar por una metamorfosis y convertirse en adulta, se transforma en un animal parásito. Es así que se «equipa» de penetrantes dientes y de una tosca lengua. Esta le facilita perforar la piel de otros peces y aspirar su sangre, así como otros líquidos corpóreos, para su nutrición.
La lamprea se adhiere a sus víctimas, presas vivas, de las que se alimenta con su sangre y carne, hasta que logra satisfacerse o matarla. Puede-en un tiempo de apenas cuatro horas-asesinar a un pez del tamaño de una trucha.
De preferencia escogería a un tiburón o a un salmón, pero cualquier mamífero marino le sirve. Si está adherida a animales mucho más grandes, puede incrustarse y alimentarse de éstos por días o semanas enteras.
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