Hay varias versiones sobre las raíces del Maine Coon. Este gato gigante se considera la raza felina doméstica más importante del planeta. Pudo originarse por un viaje fallido de María Antonieta. Se dice que cuando la reina francesa quiso huir del país, se embarcó hacia USA acompañada de media docena de sus felinos angora de Turquía. Aunque la reina no arribó a puertos estadounidenses, puede que sus mininos sí, específicamente a Maine.
Otra historia involucraría a un marinero de nombre Tom Coon. Este sería un amante declarado de felinos, incluyéndoles así en los barcos en que navegaba. Por otra parte, es probable que coon provenga de “racoon” que se traduce como “mapache”, aludiendo así a la cola de este gato.
Características del Maine coon
El Maine coon posee una cabeza media, un poco sinuosa y cuadrada. Sus pómulos sobresalen, su barbilla se alinea tanto con el hocico como con su labio superior. Tiene orejas alargadas así como afiladas. Tiene ojos enormes ovales y de colores varios, pero nunca azules.
Su complexión es atlética y rectangular. El macho tiene un cuello marcado de músculos y la región pectoral amplia. La hembra es más compacta. Su pelaje muestra buen aguante ante nieve o agua. Es breve en su testa, aunque en el resto del cuerpo es más largo. Llega a medir hasta un metro de longitud desde la nariz, hasta la cola.
Los tonos más frecuentes incluyen humo, diluido, sólido o tabby. Ahora, cualquier patrón siamés o chocolate es impropio del Maine coon.
¿Cómo se comporta el Maine coon?
Este felino es afectuoso y perezoso por naturaleza. Es un hábil cazador de roedores, atrapándolos con agilidad. A causa de su pelaje impermeable, podrán jugar en el agua con sus juguetes predilectos. Aman estar al aire libre o compartir con otros gatos.
Se afanan en comunicarse con animales diversos, incluyendo los que atrapan. Para ello, el Maine coon cuenta con una variedades de maullidos, parloteos y gorjeos.
Su alimentación
Pueden comer diversos alimentos, prefiriendo en sumo grado los mariscos. Su menú es muy parecido al de otros gatos. No obstante, hay que cuidar muy bien las cantidades que consume, debido a que comerá de forma desmedida siempre que pueda.
Una alimentación excesiva más el sedentarismo puede acabar en una obesidad mórbida. Se han registrado algunos casos en los que el felino alcanza los 20 kg. La cifra está muy alejada de los 4 a 9 kg de su peso ideal.
Su alimento debe ser de gran calidad. Bien sea una dieta cruda, recetas hogareñas o piensos. Lo mejor será segmentar las cantidades en dos o tres tomas al día.
Convivencia
El grueso de los Maine coon destacan por su alta sociabilidad, siendo muy unidos a sus dueños. Sin embargo, desde la tercera hasta la séptima semana de vida necesitará aprender sobre socialización. Lo conseguirá conviviendo con su mamá y el resto de la camada.
Esta relación le enseñará el lenguaje de los gatos, cómo jugar o a abstenerse de morder a otros. Durante este periodo, también será fundamental el contacto con personas, así se evitará que de grande se muestre temeroso. El Maine coon es juguetón, tanto de cachorro como de adulto.
Es inteligente, reconoce órdenes y palabras diversas. Es ideal para una rutina de familia dinámica con o sin niños. Tiene bien ganado el mote de “dulce gigante americano”. Si bien es dominante, esta conducta no se transforma en violenta. Se adapta mejor a la vida de campo, donde explora o caza a placer.
Destaca por su docilidad. Debido a su mullido pelaje y su gruesa contextura puede tolerar el invierno más intenso.
¿Qué cuidados amerita?
Si bien el Maine coon se limpia con regularidad utilizando su lengua, necesitará la ayuda humana. De tal manera que requerirá un cepillado semanal para conservar su pelaje brilloso y hermoso. Este hábito permitirá advertir problemas en su piel, dolencias o ataques parasitarios.
Lo más aconsejable es emplear cepillos de cardas para la faena. De forma general, no se acostumbra bañar a los gatos porque ellos se encargan de limpiarse. Pero si se le acostumbró de pequeño, puede dársele un baño al mes. También necesitará un arenero amplio y rascadores.
Elementos como hierba gatera, túneles o pasarelas serán un gran entretenimiento para ellos. Un infaltable para un individuo feliz consiste en el tiempo de juego con la familia. Puede oscilar desde los 20 a 40 minutos.
¿A qué enfermedades son propensos?
Solo el sobrepeso al que está “expuesto” el Maine coon se traduce con facilidad en dolencias coronarias. Así como en deformación de sus articulaciones o displasia de su cadera. Sin embargo, hay otras enfermedades que se asocian a esta raza.
Entre ellas están las deformaciones en el área pectoral. Acá se evidencia una depresión de su esternón, provocando una presión tanto sobre los pulmones como el corazón. La displasia de cadera puede llegar a incapacitarlo, se hunde su lomo o patas posteriores y se le nota siempre fatigado.
También puede padecer porque las paredes del órgano cardiaco se engrosen. Normalmente, el más afectado es su ventrículo izquierdo. Los científicos lo denominan cardiomiopatía hipertrófica felina y disminuye la capacidad de su corazón. Puede acabar en una muerte precoz, suele afectar a 20% de la raza.
Otros padecimientos felinos incluyen el tifus, caracterizado por la inapetencia y merma de leucocitos. La rabia y el Síndrome de inmunodeficiencia felina, el equivalente al SIDA en humanos. Asimismo, pueden desarrollar leucemia. Por tales factores, es imprescindible una revisión rutinaria por parte del veterinario.
Ejemplares de concursos
Desde el comienzo de los certámenes felinos, el Maine coon ha estado presente. De hecho, cuando se realizó el primero en los espacios de Madison Square, en la Gran Manzana, Cosey fue la ganadora.
Cosey, un individuo de Maine coon, inició así desde 1895 dejando claro el esplendor de la raza. En la actualidad, estos gatos gozan de gran aceptación en el mundo de los criadores por su glamour y presencia.
¿Cuánto puede costar adoptar un Maine coon?
El Maine coon dista de ser un ejemplar económico. Se puede comprobar que en los criaderos de mediana calidad están valorados en 800 €. En cambio, en uno de alta gama que garantiza su desparasitación, vacunas y pedigrí incluso alcanzan los 1500 €.
Las tiendas de mascotas no suelen tenerlos. En contraste, abundan los estafadores que usan fotos de portales especializados. Solo que su precio sea inferior a los 800 € debe despertar las alarmas de un potencial comprador. En las tiendas de animales es más factible encontrar cruces en lugar de uno puro.
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