El mosquito viene a ser un insecto que vuela en el ambiente en busca de alimento. La hembra se nutre de la sangre y el machos de las plantas. Este animal es transmisor de virus, infecciones y otras enfermedades que pueden llegar a ser mortales si no se tratan a tiempo.
Los mosquitos que pican provienen de la familia Culicidae. Sin embargo, hay otras especies que resultan ser parientes de los Quironómidos, Psicódidos y Tipúlidos.
Una particularidad de estos especímenes, es que nacen y se desarrollan en agua. Es allí donde dejan sus huevos para que nazcan las larvas y completen su crecimiento. Cuando pican, dejan una erupción incómoda en la piel. Por eso es necesario usar repelentes cuando se está en un lugar con mosquitos.
La cantidad de sangre que el mosquito succiona no es de mayor relevancia. El riesgo recae en las bacterias que pueden dejar depositadas, pues dan paso a patologías muy delicadas como la malaria, el dengue, la fiebre amarilla, el chikunguya y el zika, entre muchos otras.
Clasificación del Mosquito
Con el paso del tiempo se ha realizado diversos estudios que han permitido tipificar al mosquito de la siguiente manera:
- Culicidae, Este núcleo incluye los mosquitos aedex, culex y anopheles. Las hembras chupan la sangre para nutrirse, por eso son las principales transmisoras de enfermedades.
- Psicódidos. Son de un tamaño más diminuto que los culicidae, y las hembras de esta especie contagian la leishmaniasis (llagas o úlceras cutáneas).
- Quironómidos. Se parecen a los psicódidos, pero no pican, son inofensivos.
- Tipúlidos. Son mosquitos mucho más grandes, similares en tamaño a las moscas, pero no pican por lo que no hacen ningún daño.
Características del mosquito
El mosquito tiene el cuerpo delgado y alargado, con dos pares de alas (unas más largas que las otras), y seis extremidades (tres de cada lado) finas y muy largas. También cuenta con dos antenas y una trompa prolongada con la que succiona. Ese pico sólo lo tienen las hembras, y se identifica con el nombre de probóscide. En esencia, es la parte dura de la boca que inyecta el animal en la piel.
La anatomía del mosquito consta de tres partes: cabeza, tórax y abdomen. En la primera tienen los ojos, las antenas –utilizadas para ubicar sus alimentos- y la boca, llamada palpus. Además, agrupa todos los sensores de su organismo.
El tórax del mosquito está compuesto por el corazón, los músculos que usa para volar, los ganglios y la tráquea. Es en esta área de su cuerpo donde se encuentran las alas con las patas.
En el abdomen, por su parte, están los órganos que cumplen con el proceso de la digestión y los excretores.
Reproducción del Mosquito
Los mosquitos hembras necesitan aspirar sangre para vivir y poner sus huevos. Gracias a ella consiguen las proteínas necesarias para completar su ciclo reproductivo llamado gonotrófico.
Una vez que chupa la sangre, el mosquito vuela a donde haya un depósito de agua para poner sus huevos. Al salir las larvas, éstas se quedan allí como por una semana. Luego pasan a una etapa donde se convierten en pupa y posteriormente en adultos.
Hábitat del Mosquito
Cualquier ambiente donde haya agua estancada es ideal para la reproducción de los mosquitos, eso incluye charcos, canales, pantanos, ríos, huecos, pipotes, cisternas y otros. Basta con que haya un centímetro del líquido para que puedan multiplicarse.
En los climas tropicales es donde más abundan los mosquitos, aunque también los hay en los más fríos.
¿Cómo detecta su presa?
Gracias a los sensores que tienen en su sistema (químicos, visuales y de temperatura), los mosquitos detectan a distancia donde hay sangre para alimentarse.
A través de los sensores químicos perciben el dióxido de carbono y el ácido láctico que emanan los humanos y los mamíferos mediante su respiración. Cuando lo hacen van en búsqueda de ellos. Al acercarse a su presa siente el calor de la sangre y la pica.
Su sentido de la vista es muy desarrollado. En consecuencia, los mosquitos tienen la capacidad de ver en infrarrojo. Se sienten más atraídos por los colores oscuros que por los claros. Incluso, si la persona se mueve saben que es una víctima fácil de atacar, si usa prendas azules o negras.
Generalmente, los mosquitos embisten por la mañana y al caer la tarde. Asimismo, aprovechan la oscuridad de la noche.
Alternativas para alejarlos
En el mercado hay productos químicos y naturales que-al ser aplicados en la piel-ayudan a ocultar los olores para mantener alejados a los mosquitos, y así evitar las picaduras.
Existen repelentes hechos a base de Deet, hojas de savia y citronella, cuyo olor cítrico aleja a los mosquitos.
En caso de ser víctima de los mosquitos y tener alguna picadura, es necesario lavar la zona afectada con agua fría y colocar una crema antihistamínica, para que no haya infecciones y calmar el dolor.
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