En 1520 un miembro de la tripulación de Magallanes vio a unos “extraños gansos” nadando cerca de la embarcación, y no eran más que unos pingüinos que fueron llamados pingüinos de Magallanes (Spheniscus magellanicus), en honor a este episodio.
Conocido también como pingüino patagónico, pingüino magallánico, patranca o pachanca, el pingüino de Magallanes pertenece a la familia Spheniscidae. Anida en las Malvinas y región costera de la Patagonia argentina y chilena. Migra hacia regiones norteñas durante el invierno, sumergiéndose en aguas uruguayas y brasileras, que son más cálidas. Se estima que vive de 10 a 20 años. En la actualidad la UICN lo considera una especie casi amenazada.
Características del pingüino de Magallanes
Su estatura promedio se ubica entre los 35 y 45 centímetros, y suele pesar 3 kg. Su testa es negruzca, con una línea nívea que «nace» a la altura del ojo. De allí bordea sus oídos y barbilla, para unirse en su garganta. En el lomo se aprecia un plumaje negro-grisáceo, que se torna blanco en la región frontal. Cuando nada, la zona oscura se confunde con los fondos marinos. Visto desde las profundidades, parecerá el brillo de la superficie, por lo que puede camuflarse con facilidad.
Posee alas breves pero poderosas, incapaces de volar. Sin embargo, funcionan como aletas propulsoras permitiéndole al pingüino de Magallanes alcanzar los 45 km/h. Este animal cuenta con un esternón sólido y unos pectorales bien ejercitados, que facilitan su nado. Puede ver bajo el agua, pero cuando sale de ella se evidencia su hipermetropía. Su cola está «equipada» con la glándula uropigial que le permite segregar aceite impermeable. Así lubrica su plumaje con ayuda de su pico y regula la temperatura de su cuerpo.
comportamiento del pingüino de Magallanes
Tiene un carácter muy social. Pueden sumergirse hasta por tres minutos, pero normalmente salen pasados 120 segundos. Las inmersiones son desde los 46 a los 97 metros de profundidad. Emitin una variedad de sonidos en señal de advertencia, en medio de peleas, o como muestra de reconocimiento entre ellos. En la temporada de apareamiento se vuelven más violentos, así que los enfrentamientos entre los machos son usuales. De hecho, varios pingüinos de Magallanes acaban con serias heridas.
En las épocas calurosas pueden sobrecalentarse. En consecuencia abrirán sus aletas de cara a los laterales, para que la brisa regule la temperatura. Puede protegerse de los rayos UV escondiéndose entre matorrales chatos.
Alimentación
El pingüino de Magallanes come dentro del mar. Su menú está compuesto por pulpos, anchoítas, kril, calamares, pejerrey, sardinas y crustáceos varios. Tiene una táctica de caza bastante específica. Nada formando círculos en torno a los cardúmenes, y los va haciendo cada vez más pequeños para rodearlos. Después de algunos giros se lanza tras la presa y la captura.
Este animal toma agua salina sin inconvenientes. Su organismo le permite filtrarla por medio de glándulas que segregan la sal. Tales ganglios se encargan de complementar la función de los órganos hepáticos.
Reproducción
El pingüino de Magallanes tiene hábitos monógamos. Se organiza por colonias donde construye sus nidos, siempre en lugares específicos de la región costera. Prefiere las superficies blandas para excavar sus guaridas.
En ocasiones opta por hacerlo debajo de arbustos, chaparros o similares. Los escondrijos se “reciclan” al año siguiente. Cada pájaro escogerá cuál quiere ese año y lo acondicionará para sus futuros polluelos.
Sus favoritos son los terrenos próximos al agua. Aunque los expertos han encontrado nidos que distan hasta 1 km de las costas. El pingüino de Magallanes arriba en septiembre, mentalizado en alistar el nido y buscar pareja. En octubre ocurre la puesta, generalmente de un par de huevos. La dulce espera será apenas de 42 días. La pareja se turnará para mantener tibios a los huevos e ir de caza al agua.
Al principio, cada pichón tendrá un plumón parejo de tonalidad grisácea. Para el transcurso de febrero será casi independiente de sus papás. Con la entrada de abril, comienza la época de migración hacia aguas brasileras.
Volverán a los seis meses.
depredadores del pingüino de Magallanes
El pingüino de Magallanes tiene varios depredadores naturales. Los más relevantes son las orcas, focas, petrel gigante o leopardos. Por otra parte, sus huevos o polluelos son cazados por diversos pájaros. Entre ellos las gaviotas cocineras, palomas antárticas, gaviotas pardas y gaviotas australes. Algunos mamíferos también disfrutan de darle caza, como por ejemplo los zorrinos, armadillos y zorros colorados.
El impacto del ser humano
Previo a que el pingüino de Magallanes fuese una especie protegida, eran de las presas predilectas de los cazadores. Todo ello con el propósito de obtener su grasa y aceite animal.
De igual forma, incontables ejemplares fueron sacrificados hasta mediados del siglo XX. Las causas carecían de toda lógica, siendo empleados como combustibles para las embarcaciones que funcionaban a vapor.
El ser humano ha afectado en gran medida a la especie, no solo de forma directa o voluntaria. También de manera indirecta produce la muerte de importantes cantidades al año.
¿Cuáles son los motivos? Debido a la pesca desmedida de varias especies que conforman el sustento del pingüino de Magallanes. Por supuesto, cada derrame petrolero tiene consecuencias mortales sobre ellos.
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