En la Antártida, reside una de las especies de aves de mayor tamaño y de características bastante particulares, estamos hablando del pingüino emperador – Aptenodytes forsteri -. Esta variedad de pingüinos resalta del resto por su tamaño, su particular ciclo reproductivo y por el tipo de sonidos que puede emitir. El pingüino emperador es una especie endémica del lugar donde habita y su población crece de manera constante. El clima hostil donde estos animales desarrollan su vida, ha motivado profundos estudios acerca de su comportamiento.
Características físicas del pingüino emperador
En su edad adulta, un pingüino emperador puede llegar a medir entre 1,15 y 1,20 metros de altura y su peso va de los 20 a los 45 kilogramos. Aunque las hembras suelen pesar menos que los machos, no existen diferencias físicas marcadas entre los sexos. El peso del pingüino emperador también está condicionado por la temporada debido a que, en las épocas de bajas temperaturas, estos animales acumulan grandes cantidades de grasa corporal, sobre todo cuando comienza el período de muda en el que pierden su plumaje para ser reemplazado por uno nuevo. Durante el proceso de incubación de los huevos, esta variedad de pingüinos pierde una parte importante de su peso. Mientras el macho se encuentra incubando debe soportar 2 meses de temperaturas extremadamente bajas y en este período no se alimenta por lo que la pérdida de peso es notable. Durante las épocas de apareamiento el macho del pingüino emperador pesa aproximadamente 38 kilogramos y la hembra, 30. Luego, este peso se va reduciendo.
El plumaje del pingüino emperador es muy similar en machos y hembras. Presenta plumas de color negro que cubren su espalda, su cabeza, la garganta y la parte dorsal de las aletas y la cola. El vientre y la parte inferior de las alas son de color blanco y a medida que nos acercamos al pecho y al cuello, las plumas van adquiriendo un color amarillo pálido. Los auriculares – rodeando el oído del pingüino – son de un amarillo muy intenso.
El cuerpo del pingüino emperador tiene una adaptación corporal hidrodinámica que le permite minimizar la resistencia del agua cuando nada, también sus alas se han vuelto rígidas y se asemejan a aletas, brindándole una gran movilidad natatoria.
Los pingüinos emperadores se alimentan esencialmente de peces, algunas veces de krill y de crustáceos, para ello cuenta con una lengua provistas de púas orientadas hacia el interior del animal, evitando de esta manera que las presas se les escapen del pico. Éste es bien robusto y con una leve curvatura hacia abajo.
El pingüino emperador posee un andar erguido pero la disposición de sus patas – muy atrás en relación al resto del cuerpo – le dificulta caminar en la tierra, lo hace de manera lenta y torpe. Sin embargo, esta disposición de las patas le permite al pingüino que actúen como un timón en el agua.
El comienzo del ciclo reproductivo del pingüino emperador
El ciclo reproductivo del pingüino emperador es uno de los más asombrosos del reino animal. Estos animales alcanzan la madurez sexual a los 3 años, aproximadamente. Este ciclo reproductivo se prolonga a lo largo de un año. Comienza al inicio del invierno antártico – marzo, abril – cuando los machos hasta casi 150 kilómetros, a las colinas de anidamiento donde buscarán una hembra para aparearse. La proporción de hembras con relación a los machos es mucho mayor – 60% contra 40% – lo que, generalmente, ocasiona disputas entre ellas por conseguir un macho.
Cuando un macho no dispone de una hembra, se coloca en una posición estática, mueve la cabeza hacia su pecho y lanza unos sonidos de cortejo muy particulares. Cuando macho y hembra se han elegido entre sí, se colocan frente a frente durante unos instantes, estiran el cuello y luego comienzan a caminar juntos entre la colonia como forma de mostrarse como pareja.
Luego de producido el apareamiento, durante el mes de mayo, la hembra desovará un único huevo que puede llegar a pesar hasta medio kilogramo. Luego de poner el huevo, la hembra del pingüino emperador queda sin reserva de alimentos por lo que dejará el huevo al cuidado del macho y emprenderá una travesía al mar para alimentarse.
El macho incuba el huevo hasta su eclosión
La hembra le transfiere el huevo al macho que, para incubarlo no se sentará sobre él, sino que lo colocará en una especie de marsupio o bolsa de incubación que se ubica entre sus piernas. Durante todo el proceso de incubación por parte del macho, éste permanecerá inmóvil para evitar perder el huevo. Los machos se acurrucan todos juntos para soportar, de esta manera, el invierno antártico.
Luego de 2 meses alimentándose, las hembras regresan a donde los machos se encuentran incubando los huevos. Constituye un espectáculo maravilloso ver como a través de sonidos, la hembra logra ubicar al macho entre miles de pingüinos emperadores. El macho habrá pasado casi 120 días sin alimentarse y ha perdido casi 20 kilogramos de su peso.
La eclosión del huevo puede durar hasta 3 días y se produce antes de la vuelta de la madre. Al nacer, los polluelos sólo están cubiertos de una suave pelusa y son totalmente dependientes de sus padres. Cuando la hembra regresa, regurgita parte del alimento que ha consumido. Antes de eso, el polluelo recibe de su padre una sustancia producida en el esófago de éste, que cuenta con los nutrientes necesarios, y este se constituirá en el primer alimento que reciba la cría.
A partir de este momento, la cría del polluelo estará a cargo de la madre y el padre se desplazará hasta el mar para alimentarse.
La “guardería” del pingüino emperador
Cuando los polluelos de toda la colonia ya cuentan con unos 45 a 50 días de edad, se agrupan y se acurrucan todos juntos, en una suerte de guardería, para protegerse del frío y del ataque de los predadores. Mientras tanto, macho y hembras van al mar en busca de alimentos y regresan periódicamente para alimentar a sus crías. El porcentaje de mortalidad de las crías, durante este período es muy elevado pero una vez que alcanzan los 2 años de edad, el índice de supervivencia supera holgadamente el 95%.
En el mes de noviembre, los jóvenes pingüinos comienzan a mudar su plumaje original por el que será el definitivo, durante este proceso, los padres dejan de alimentarlos y los pingüinos abandonarán la colonia para comenzar a alimentarse por sus propios medios.
Los armoniosos sonidos del pingüino emperador
Esta especie de pingüinos es única por su manera de vocalizar. Los sonidos emitidos por el pingüino emperador se producen en 2 bandas de frecuencias, con sus respectivos armónicos. Con ellos, estos animales transmiten todo tipo de información al resto de la colonia y en particular, a la hembra con la que se ha apareado.
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