El schnauzer gigante es una raza canina originaria de Alemania, que en el siglo XVII, era aprovechada para el trabajo de campo. Los primeros ejemplares vivieron en Suabia, en la región de Baviera y Württemberg, y eran considerados una variación de pelo duro de los pinscher alemanes. Si hay algo que lo describe, es su peculiar bigote.
Su pelaje le permite sobrellevar el inclemente invierno de Alemania, e incluso las picaduras de algunos insectos. Por ello, es excelente para vivir en climas fríos.
Origen del schnauzer gigante
Se estima que el schnauzer gigante nació por la mezcla de distintas razas como pastor alemán, rottweiler, bóxer, gran danés negro, thuringian shepherd, doberman y bouvier des flandres, con el schnauzer estándar.
Fue un gran aliado de los granjeros durante muchas décadas, pues cuidaba las propiedades y llevaba a los animales desde el rancho hasta el mercado, mostrando así su gran inteligencia.
En el siglo XX, se podía encontrar al schnauzer gigante en cervecerías, corrales, fábricas y carnicerías de Baviera, como perro guardián. Fuera de la zona, era desconocido hasta que estalló la Primera Guerra Mundial, y se convirtió en una raza del servicio militar.
En la actualidad, es común hallarlo como miembro de la policía, donde destaca por su obediencia y astucia en actividades de búsqueda y rescate.
La mayoría de clubes de schnauzer en Europa, alaban las cualidades para el trabajo de este animal.
Su carácter
El schnauzer gigante ama jugar. Está lleno de energía, es amoroso con sus dueños, y los defiende ante cualquier amenaza. Por su tamaño, intimida de inmediato, y es muy territorial.
Esta raza necesita mantenerse en movimiento, por lo que debe ejercitarse diariamente. Es muy inteligente y aprende bastante rápido, por lo que termina siendo un excelente compañero de travesuras, ideal para los niños.
Le gusta ver felices a sus dueños, así que es dócil y obediente. Quien crie a un schnauzer gigante debe tener siempre un juguete a la mano, porque suele aburrirse con facilidad.
Posee un instinto cazador que-en ocasiones-lo hace ser agresivo. Incluso, las hembras pueden ser hostiles con otros perros de su sexo.
No hay que extrañarse si se le ve correr detrás de un carro, pues de seguro piensa que es una presa grande y lo perseguirá entre ladridos.
Comportamiento DEL SCHNAUZER GIGANTE
Por su tamaño y energía, se sugiere tenerlo en espacios amplios, donde pueda desenvolverse con facilidad. Debido a que es un animal grande y fuerte, es posible que golpee o lesione a los infantes por accidente. Esto explica porqué los criadores no recomiendan que conviva con niños pequeños.
El schnauzer gigante no es dado a la soledad. Amerita cariño, atención y cuidado frecuente. Si se descuida, su carácter cambiará y se volverá triste y amargado, perdiendo la confianza hacia sus compañeros.
Consejos para su alimentación
Lo ideal es darle pienso de gama alta, porque contiene materia prima adecuada para su sano desarrollo. Si se está en proceso de cambiar la marca o calidad, se sugiere hacerlo gradualmente para que su sistema digestivo se adapte y se eviten las diarreas. Esto aplica principalmente para los cachorros.
Se sugiere proporcionarle dos comidas diarias, especialmente si es adulto. La cantidad la determina el veterinario, pero ronda de 500 a 700 gramos por día.
El agua es vital y debe estar libre de sucios y bacterias.
Cuidados DEL SCHNAUZER GIGANTE
Si aún tenías dudas sobre por qué elegir un Schnauzer gigante, te encantará este dato: no bota casi pelos. Así que hará más sencilla tu faena de limpieza.
La capa de pelo corta amerita escasa atención. Será suficiente con cortarla y peinarla bimensualmente. Sin embargo, la capa larga requiere más atención y un cepillado habitual.
Si lo llevas al médico, lo vacunas, lo bañas y lo cuidas, tendrás en el schnauzer gigante un compañero por largo tiempo, pues llega a vivir alrededor de 12 años humanos.
Su hocico negro azabache junto con su barba áspera y larga, será lo primero que veas cuando abras la puerta. Con sus 70 centímetros de altura y 35 kilos de peso, estará dispuesto a ser tu amigo fiel.
Aunque tiende a ser un perro sano, hay algunos que pueden presentar cáncer, torsión gástrica, epilepsia y displasia de cadera. Sus movimientos bruscos pueden desencadenar dolencias en las articulaciones, por lo que se debe tener especial precaución.
Apariencia del schnauzer gigante
Podrás hallar al schnauzer gigante con pelaje negro o “sal y pimienta”. Este último es una mezcla de gris, blanco y negro. Su pelaje es duro y denso, cuenta con simpáticas cejas tupidas que hacen juego con su barba.
Su dorso es cuadrado y atlético. Su andar es característico, pues es vigoroso, firme y de trote veloz, como se espera de un ejemplar en forma. Sus orejas naturales, sin cortar, son pequeñas, pero generalmente se “podan” y lucen puntiagudas, en forma de V.
Su pecho es un poco ancho y profundo, y se extiende hasta los codos. Los flancos se recogen en el vientre, aunque no es gran proporción.
En la cara del schnauzer gigante no solo destacan sus bigotes, sino su frente plana y la marcación de la depresión naso-frontal, debajo de las cejas. Su hocico es recto y tiene una peculiar forma de cuña. Los labios están bien adheridos y son de color negro.
La cola luce como sable o en forma de hoz, y debe mantenerse natural. Su pelo está bien pegado al cuerpo y tiene una textura alambrada.
Existe la creencia de que aquellos de pelaje claro poseen un carácter más dócil que los negros. Eso no está comprobado.
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