En algunos países como la India está protegida y es sagrada, mientras que en otros es muy apreciada por su carne y su piel, pero sobre todo por su leche. Se trata de la vaca, un mamífero de la familia de los bóvidos, cuyo origen se relaciona con el uro salvaje que habitaba en el sudeste asiático, y es considerado el antecesor de los bóvidos que se conocen en la actualidad, incluyendo los del género Bos, al que pertenecen los toros, los cebúes y las vacas.
Su nombre científico es Bos primigenius taurus, y aparentemente fue domesticada hace siete mil años, junto con la oveja, el cerdo y la cabra.
Una de las características más notorias de la vaca es su imponente tamaño, ya que puede medir 150 centímetros de largo y pesar entre 600 y 800 kilogramos.
Más de su origen
No se tienen registros exactos del número de especies que hay, pero se presume que pueden ser unos 1.300 millones.
Las primeras poblaciones se desarrollaron en Asia, Europa y África, lo que facilitó su diversificación y adaptación a diversos climas y entornos. Con su domesticación iniciaron además los cruces, que permitieron incrementar las variedades, mejorando aspectos como productividad, fecundidad, pelaje, comportamiento, masa muscular, composición y tamaño, entre otros, por lo que hoy es posible hallar vacas con atributos específicos en casi todo el mundo. Una de las más conocidas es la vaca charolesa, autóctona de Francia, que es vista como una de las mejores productoras de carne.
La falta de pasto dejó de ser un problema para su multiplicación, puesto que hay ganaderos que fabrican compuestos a base de caña de azúcar y otros productos, para garantizar su sustento.
Características de la vaca
La vaca es un cuadrúpedo artiodáctilo, con un cuerpo robusto y musculoso, y una altura promedio de 1,20 y 1,30 metros.
La cola y las patas son alargadas. Posee pezuñas, el cuello es corto y algunas tienen cuernos. El pelaje es corto y varía de tonalidad dependiendo de la raza. Las hay unicolor o con pintas blancas, rojas, negras, gris y marrón, entre otras. En sus facciones destacan sus grandes ojos y su hocico extendido y grueso, con unos orificios bastante amplios.
Su dentadura está compuesta por 32 piezas que se amoldan para facilitar la masticación. Su lengua es gruesa y de textura áspera.
La vaca tiene cuatro tetillas a través de las cuales nutre a sus crías con una leche muy apreciada por el hombre, quien se ocupa de su ordeño. Su temperatura es de 39 grados.
Reproducción de la vaca
La vaca tiende a madurar sexualmente a los 12 meses, pero esto dependerá del linaje. Se aparea en cualquier época del año. Su ciclo fértil es del 21 días y su encelo dura entre 6 y 30 horas.
Cuando logra embarazarse, cumple con un lapso de gestación de nueve meses aproximadamente. Casi siempre da una sola cría, a la que amamanta durante 10 meses.
En toda su vida puede parir unos 39 becerros. Se puede reproducir por vía natural o por inseminación artificial.
Alimentación de la vaca
La vaca se nutre de hierbas, alfalfa, pasto y caña de azúcar. Puede pasar hasta ocho horas al día comiendo.
Gracias a la aspereza de su lengua, capta las plantas y las tritura. La saliva le sirve para procesar la comida que va a parar a su estómago poligástrico, integrado por cuatro cavidades, y que le ayuda a digerir las celulosas.
Mientras se alimenta, la vaca rumia, traga y envía el producto al retículo, desde donde es devuelto al hocico para ser repasado por segunda vez. De allí se traslada al rumen, donde es embestido por hongos y bacterias que favorecen la absorción. En una última fase, ese alimento va al omaso donde se atrae parte de los líquidos para luego “viajar” al abomaso o estómago verdadero, donde se condensan los nutrientes.
La vaca llega a masticar unas 10.000 al día, y a rugir unas 300.000.
Vida y usos
Dependiendo del cuidado, uso y hábitat, la vaca puede vivir de 15 a 25 años. Al ser muy utilizada por su carne, piel, leche y sus derivados, ese período podría reducirse significativamente, puesto que el hombre la cría con fines comerciales y para su propia supervivencia. Claro que existen excepciones. Muy famoso fue el caso de una vaca irlandesa, a la que llamaron Big Bertha, que llegó a vivir 49 años.
Desde tiempos remotos, la vaca ha servido de sustento a la humanidad. No solo es comestible, sino que también es empleada para la elaboración de prendas de vestir y utensilios diversos con su cuero y huesos. Hasta la industria química se vale de su grasa y su piel para la fabricación de ungüentos, cremas, zapatos y ropa. Sus partes óseas son procesadas para la producción de abono y alimento para otros animales.
la vaca, un Animal en riesgo
La vaca puede sufrir muchas enfermedades ocasionadas por bacterias, por lo que son muy comunes los episodios de diarreas por E. coli, o salmonelosis, que afectan su aparato digestivo.
También llega a presentar mastitis, brucelosis, queratitis y pasteurelosis, al igual que corren el riesgo de presentar patologías originadas por microbacterias peligrosas que originan la tuberculosis.
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